Talamanca del Jarama -13/04/2024- Primera semifinal del Circuito de Novilladas de la Comunidad de Madrid

 Así fue la tarde...

Tras saltarse varias de las premisas con que se dio forma al Circuito de Novilladas de la Comunidad de Madrid, la primera semifinal del certamen llegaba a la plaza de toros portátil de Talamanca del Jarama, durante sus fiestas patronales y con un encierro matinal. Por suerte, no fue para tanto, a excepción de que, el festejo, no sirvió para sumar una tarde a la feria madrileña, sino que sustituyó una de las dos novilladas que acostumbra a celebrar el Ayuntamiento. Y es que, lo que se haga, que, al menos, sirva para sumar.

En lo que al al cartel se refiere, el duelo ganadero entre Flor de Jara y Ángel Luis Peña suponía uno de los elencos con mayor interés ganadero del Circuito. Frente a el se verían las caras primero, segundo y cuarto clasificados de la primera ronda. Una tarde que apuntaba maneras.

Muy por encima resultó el juego de los Santa Coloma, con tres novillos que prestaron oportunidades, siendo el segundo de la tarde premiado con la vuelta al ruedo. Los de Ángel Luis Peña, mucho más serios y mejor presentados que los grises, por desgracia, no cumplieron con las expectativas, lidiando el ganadero colmenareño un encierro áspero y de escasa condición.

Juan Herrero sufrió el lote de peor lucimiento de la tarde. Al primero, de Ángel Luis Peña, que se venía por dentro y vendía caras las embestidas, no consiguió imprimirle todo el poder que demandó en la muleta, tras un interesante paso por el caballo, donde empujó con buena condición. Por suerte, o justicia, las tropelías del banderillero no fueron suficientes para, una vez caído el toro y con las mulillas esperando, la petición cogiese fuerza, quedando todo en una ovación. Frente al cuarto, un novillo con mejor condición, la faena no tomó fuerza en ningún momento.

Tras su magnífica actuación en San Agustín del Guadalix, Jarocho afrontaba estas semifinales como principal candidato. Y el burgalés, cumplió en lo numérico. Su dimensión distó bastante de la mostrada semanas atrás, pero su solvencia y el cañón que gasta por espada le bastaron para cortarle dos orejas a un buen novillo de Flor de Jara que galopó a cada embestida y derrochó clase por el izquierdo. Premiado excesivamente con la vuelta al ruedo, los apéndices obtenidos por el jóven también supusieron una sorpresa. Y es que, a pesar de encontrar diferencias entre las lidias que demandaron este ejemplar y el lidiado la tarde de San Agustín, ni el acople ni las formas fueron similares, recibiendo, a pesar de ello, el mismo premio.

El quinto, de mejor condición que sus hermanos, permitió buenos pasajes al natural, pero poco más. Sirvieron para sumar una vuelta al ruedo a la cuenta de Jarocho al que la solvencia no puede negársele.

 

Cid de María, al que sentenció la espada, dejó ante su primero lo mejor de la tarde. Frente al sexto, poco pudo decir. Sobrado de actitud, el guadalajareño no solo se fue a la puerta de chiqueros, recetó varias largas cambiadas o trató de imprimir ese extra que se le presupone a todo novillero, sino que, además toreó. Con la postura relajada y encajado firmó una bella obra de muy buen gusto y basada en la colocación, a un buen ejemplar de Flor de Jara, demostrando un interesante concepto a seguir de cerca.

 

Una tarde que, en líneas generales, supo a poco.